Jun 4
Dispatches from Elsewhere
Serie tv / Reseña
Dispatches from Elsewere ( Desde Otro Lugar) es una serie inclasificable, única y extrañamente hermosa donde nada parece ser lo que es y todo parece ser lo que tampoco es. Desde el inicio nos sitúa en nuestro rol y nos anticipa sobre todos los elementos constitutivos que conforman una historia: el clásico viaje del héroe, mencionado por varios maestros del guión como Christopher Vogler, Robert McKee, Sy Field, Alejandro Robino, Linda Sieger, entre otros. Se trata de una estructura desarrollada por el antropólogo Joseph Campbell presente en la mayor parte de los relatos, sea cual sea su género, apreciable en todo su esplendor fantástico en El Mago de Oz: Dorothy, tras el gris aburrimiento de Kansas, viaja con sus amigos en búsqueda del Mago por el maravilloso y colorido Mundo de Oz. Un camino de baldosas amarillas la llevará a encontrarse con la verdad.
Lindo y revelador el gráfico, ¿no?
Bueno, en Dispatches se destruye.
En el comienzo somos inducidos en nuestro rol. Comenzar una serie con una rebeldía sobre las estructuras clásicas, anticipa que el camino del héroe va a ser sobre todo nuestro y debemos ir superando los obstáculos que la propia serie pondrá en nuestro viaje de espectadores.
Dispatches no es una comedia, ni es una tragedia: es algo que está en el medio. O tal vez forme parte de una Nueva-Nueva Comedia Americana trasgrediendo las líneas que marcaron Judd Apatow, los Farrelly Brothers, Paul Feig, Amy Schumer, Tina Fey, Will Ferrell, Tig Notaro, Ben Stiller, Melissa McCarthy o Seth Rogen.
Una dramedia atravesada por una melancolía dulce: por comedia y dolor. Tal como Kidding de Jim Carrey, la brillante After Life de Ricky Gervais (sí, es made in England pero calza), incluso Louie de Louie CK, sobretodo en sus últimas temporadas o la autobiográfica One Mississipi de Tig Notaro.
El objetivo es trascender la comedia, llevarla a terrenos inexplorados, sensibles, poco comunes y sorpresivos. Porque la comedia no es sólo hacer chistes y el drama no es sólo lo que te hace lagrimear. La buena comedia es la que conmueve porque está espalda con espalda con la muerte, como señala Zeami sobre el Teatro Noh: la posibilidad de que crezca la flor es cuando la vida y la muerte se encuentran íntimamente.
Lo particular de Kidding, After Life, One Mississipi y Dispatches es que sus creadores y protagonistas han desarrollado sus carreras como comediantes, sobretodo en el género stand up comedy. Esto nos permite establecer la hipótesis de que los actores y actrices de comedia pueden desarrollarse con efectividad tanto en drama como en comedia. La comedia, por tener ese vínculo íntimo con el dolor, permite una mayor flexibilización expresiva.
Dispatches from Elsewhere es una serie creada por Jason Segel (Freaks and Geeks, How I Met Your Mother) basada en el documental The Institute, sobre un juego de realidad alternativa – similar a un audio tour o un “elige tu propia aventura”- llamado Jejune Institute (acá se puede ver en el caso que interese) creado por Jeff Hull. Tuvo lugar en San Francisco entre 2008 y 2011 y participaron más de 10000 personas. Si fuera aquí, sería un éxito del teatro independiente.
Jason ficcionalizó esta propuesta y la cruzó claramente con sus búsquedas e inquietudes personales en una fantasía analógica que genera una inquietud cómica casi Lyncheana con reminiscencias a The Game, The Truman Show, Matrix, Stranger Than Fiction, Labyrinth, los acertijos del Batman psicodélico e incluso Law and Order en una divertida cita directa.
Un hipnótico Octavio Coleman (Richard E. Grant) nos induce a formar parte de esta historia de la cual, literalmente, terminaremos formando parte.
“Yo soy otro tú”, es el corolario que genera el movimiento del relato. Un claro concepto espiritual y de transformación que se halla presente en la cultura maya. Ellos expresaban ese concepto de unidad en su saludo diario, IN LAK’ECH (Yo soy otro tú), al que contestaban HALA KEN (Tú eres otro yo). Habría que ver cómo llegamos al actual “Eu, ¿qué hacés?”.
Jason interpreta a Peter, un programador musical de un sitio estilo spotify que está disconforme con su vida y necesita encontrar un fin que lo motive: siente que no controla su vida del modo que controla los algoritmos de los melómanos.
Su vida se cruza con otras tres personas de similares búsquedas: Simone (Eve Lindley), Janice Foster (Sally Field) y Fredwynn (André Benjamin – André 3000 de Outkast).
Antes cité a El Mago de Oz y no fue random, si no que los personajes de Dispatches funcionan como los seres fantásticos que acompañan a Dorothy. Aquí Simone busca su lugar en el mundo, Janice enfrentar sus miedos y Fredwynn sólo quiere encontrar la verdad hasta las últimas consecuencias, aunque esto implique perderse a sí mismo. Cada episodio está definido por el tono de cada uno de los personajes con un objetivo que funciona como un Macguffin, término acuñado por Alfred Hitchcock: una excusa argumental que sólo motiva a los personajes en el avance de la historia.
Dispatches from Elsewhere juega con nuestra percepción, la multiplicidad de puntos de vista en un puzzle que se va armando y configurando durante el desarrollo de la trama, donde se revelan procedimientos narrativos e incluso dramatúrgicos.
Porque las historias son manipulaciones.
Y en realidad les mentí: la estructura dramática de Dispatches no se destruye; se reformula por lo cual nuestra mirada se ve comprometida en un juego abisal hacia un punto de no retorno. ¿Qué es la vida si no es un juego? ¿Qué es un juego si no es aprender a mirar?
Dispatches from Elsewhere es una serie de buenas vibraciones que nos hará descubrir a un nuevo Jason Segel y por qué no a sentirnos él.
Yo soy Jorge y soy ustedes que leen.
Somos nosotros.
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